sábado, 18 de abril de 2009

Dominación carnal...


La sutileza del cuerpo femenino que se entrega a los caprichos de su Diosa, a quien admira en su belleza e idealiza en su capacidad de dar placer... Me gusta sentir que quien se somete a mí -hombre o mujer- tiembla de deseo.
Apenas comienzo a compartir mis fantasías, siéntanse ustedes libres de contarme las suyas, las más ocultas. Tengo afán por seguir comprobando que la imaginación es el mejor afrodisíaco que existe.

2 comentarios:

  1. Saludos Amadiosa, la cosa promete.

    Mis fantasias (y realidades) son bastantes más duras), pero después de todo acaba como quien dice de aterrizar en este mundo, y todo se andará. Para comenzar no estaría mal sentir su culo de Diosa sobre mi cara, estando yo tumbado en el suelo, atado de pies y manos, y obligado (obligaciones así querría yo todos los dias) a lamer su maravilloso culo.

    Espero seguir leyéndola.

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  2. Gracias por su comentario.
    Sé muy bien que mi culo produce ese tipo de deseos. Mi sumiso es feliz lamiéndolo, como seguramente usted también lo sería.

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